Esperando la hora en que se sepa qué pasó, si ya se liberó de los cangrejos. La hora, esa sombra que señala las ansiedades, las expectativas y los rezos. La hora que una noche de brujos trajo, como la marea a la espuma roja. Noche de brujos y conjuros traídos por las olas del tiempo. Esperando la hora en que una sonrisa baje a regalarnos el día. Y sepamos que ella se liberó.